Situación del paciente hospitalizado, emociones y pensamientos ante esta circunstancia de vida

Hace un par de días, una persona me escribe a través de una red social y menciona su preocupación sobre una posible hospitalización, a raíz de una operación que se avecina en unos días. Menciona entre otras cosas, "… Sí las cosas salen mal, que puedo esperar, que puede esperar mi familia…" Ante esta SITUACIÓN, se me vino a la mente. Recordemos el papel de psicólogo durante el proceso de hospitalización.
Pero antes de profundizar en este tema, quiero compartir una frase, que nos invita a reflexionar de la situación que no esperamos, pero que puede generar cambios en nuestra vida, esta frase de Joseph Pulitzer; quien fue un editor estadounidense de origen judío húngaro, el cual originó la llamada prensa amarilla, y por los premios periodísticos que llevan su nombre, los Premios Pulitzer.
Ojo a las situaciones inesperadas. En ellas se encierran a veces las grandes oportunidades". Joseph Pulitzer.
Es indudable que las hospitalizaciones generan un costo de tranquilidad, nos genera ansiedad, estrés e incluso, divagamos, en como quedaremos posterior a la intervención quirúrgica, sea esta voluntaria o no, programada para un cambio estético o de urgencia vital. Sobre esto, Peter Levine dice:" El hecho de que las hospitalizaciones y tratamientos médicos suelen producir consecuencias traumáticas, resulta sorprender a muchas personas. Las secuelas traumáticas causadas por una larga inmovilización, hospitalización, y en particular por las cirugías son a menudo graves y prolongadas. Aunque la persona reconozca que la operación es necesaria, y de que a pesar de cuando el cirujano corta la carne, los músculos, y los huesos, está inconsciente, el cuerpo lo registra como un incidente que amenaza la vida. A nivel celular, el cuerpo percibe que ha soportado una herida bastante grave como para ponerlo en peligro de muerte. Intelectualmente tal vez creamos en la operación, pero a nivel más primario nuestro cuerpo no cree en ella.
A continuación, responderé algunos los interrogantes sobre el papel del psicólogo de la Salud y Clínico frente el proceso de hospitalización, tratando de forma implícita, dar luz a los interrogantes que puedan surgir de las necesidades del PACIENTE HOSPITALIZADO. A partir de estudios realizados durante estas últimas décadas.
El papel del psicólogo en el ambiente hospitalario se justifica en la relación estrecha entre los comportamientos, las emociones y las enfermedades. Ahora bien, está claro que la labor del psicólogo no se limita a sustituir comportamientos de riesgo por comportamientos de prevención, con toda la dificultad que ello conlleva, sino que además actúa como elemento clave en el tratamiento y rehabilitación de los problemas cuando éstos ya se han presentado. De esta forma, ya sea a través de una intervención directa sobre ellos, o a través de una intervención sobre las alteraciones psicológicas secundarias a los mismos, la labor del psicólogo dentro del ámbito hospitalario se hace relevante (1)
Entre las técnicas o herramientas utilizadas por el psicólogo en las intervenciones pre y postquirúrgica, cabe mencionar que dependerán así mismo a la edad del paciente y otros factores sociales, familiares, cognitivos, emocionales entre otros, para definir la idoneidad de la intervención, entre ellas se encuentran,
- La relación terapéutica,
- Técnicas Cognitivas, Apoyo psicológico, Distracción cognitiva., Reevaluación positiva, Imaginación guiada.
- Técnicas Conductuales, Relajación., Desensibilización sistemática., Suministro de instrucciones conductuales.
- Técnicas Informativas (informar a los pacientes acerca de la operación y la hospitalización.)
- Técnicas Combinadas (2)
La intervención psicológica puede operacional izarse desde diferentes aproximaciones teóricas, responsables del tipo de cambio por alcanzar; no obstante, todos los métodos tienen una naturaleza psicológica y existen, (Roa 2000) objetivos comunes como:
- Estimular la toma de conciencia acerca de la situación que se está viviendo y las respuestas a ella.
- Disminuir las reacciones emocionales negativas.
- Aunque no se elimine completamente el malestar, puede llevarse a niveles manejables para el paciente y lograr un fortalecimiento emocional.
- Fomentar la expresión de emociones y normalizar las respuestas en relación con el estímulo que se enfrenta.
- Ofrecer información nueva y relevante, que permita la reestructuración de falsas concepciones y de expectativas inadecuadas acerca del evento vital.
- Designar al paciente tareas concretas fuera de la sesión de trabajo que le permitan desempeñar un rol activo en función de su propio bienestar y que le estimulen la confianza en sus propios recursos y potencialidades.
- Desarrollar seguridad y expectativas de que se puede responder de manera más efectiva ante la situación. Este constituye un factor crítico en el proceso, sin la motivación y la confianza de que se alcanzará una meta específica, resulta una utopía el solo planteamiento de dicha meta.
Uno de los primeros trabajos, ya clásico, en el que se observó la importancia de ofrecer información del procedimiento quirúrgico a pacientes antes de la cirugía, con el fin de facilitar la recuperación quirúrgica fue realizado por Egbert, Battit, Welch y Bartlet, en 1964 (citado por Giacomantone & Mejía, 1997). En este estudio se comprobó que un grupo de pacientes que había recibido la visita del anestesista el día antes de la operación para dar información general acerca del procedimiento médico, comparado con un grupo al que solo se le había administrado barbitúricos, necesitó menos días para recuperarse, menos analgésicos y sufrió menos ansiedad.
Igualmente, la familia del paciente presenta un sinnúmero de emociones negativas debido a la situación que están viviendo. Hernandez y Florenzano (1999) hablan de la teoría del estrés familiar la cual hace referencia a los efectos de la acción de éste en la familia y a las crisis como respuesta familiar al mismo. Enuncia los conceptos de vulnerabilidad a las crisis y el poder de recuperación, la acción de la familia para reducir la intensidad de las situaciones demandantes, por mantener los recursos existentes, buscar otros adicionales y reestructurar cognitivamente la situación. (3)
Se definen otros acontecimientos como generadores de estrés familiar, resultan de la vivencia de situaciones límites que son de carácter accidental, ponen a prueba el máximo de los recursos adaptativos de las personas y las familias (Arés, 1999). La enfermedad es un proceso de deterioro que daña el funcionamiento biológico, psicológico y social de una persona y que puede conducir a la muerte, supone una situación de crisis, un acontecimiento estresante que produce un impacto en la vida del sujeto y su familia, una ruptura de sus comportamientos y modos de vida habitual (3)
La atención psicológica al acompañante y familiares, se ha demostrado utilidad de la introducción del acompañante en unidades cerradas de terapia, para el paciente y para el propio personal asistencial, a los familiares se les brinda psicoterapia de apoyo, dirigida a adecuar los mecanismos de autocontrol y autorregulación de la personalidad. Otro aspecto importante es la información médica adecuada, que aclara dudas y explica evolución y pronóstico del paciente. Según Amai Latiegui Garrido (2005) el acompañamiento de un psicólogo en las siguientes situaciones son pilares en el abordaje familiar, como son, hacer frente a la hospitalización, afrontar los síntomas asociados, controlar ruminaciones, afrontamiento positivo, manejar la actividad social y afrontar los posibles problemas relacionados con la sexualidad, la pareja y familia, (4)
Entre tanto las posibles barreras u obstáculos ante la labor psicoprofilaxis quirúrgica, se relacionarían con Ansiedad pre-operatoria desmedida, así como otras respuestas emocionales y comportamentales defensivas desbordadas, afectando en sí mismo, la relación terapeuta – paciente, adherencia al tratamiento, relación cuidador – paciente, síndrome del cuidador quemado; además de otras situaciones socioeconómicas que puedan interferir en la continuidad de las intervenciones psicológicas.
Dado que los beneficios de la psicoprofilaxis quirúrgica se relacionan con la
Mejora el estado inmunológico, Mejor y más rápida cicatrización, Mejor circulación, Mayor tranquilidad y autocontrol, Mejor metabolismo, Mayor oxigenación, Menor tensión muscular, Menor estrés antes, durante y después de la cirugía, Menos complicaciones relacionadas con la cirugía y la recuperación, Menos dolor y menos analgésicos, Recuperación más rápida, Menor tiempo de hospitalización, Disminución de depresión o ansiedad, Balance en la presión sanguínea, ritmos cardiacos y respiratorios y Mayor cooperación del paciente en su recuperación.(1)
El seguimiento debe orientarse al bienestar psicológico del paciente, Evaluar el estado emocional del paciente, durante el proceso de recuperación en su periodo de hospitalización, Brindar técnicas cognitivo- conductuales que logren modificar pensamientos y conductas en los pacientes, facilitando y acelerando la recuperación, Lograr mediante la intervención psicológica, influir de manera positiva en los indicadores de recuperación clínica como: días de hospitalización, dolor, adherencia al tratamiento, complicaciones clínicas, y reingresos hospitalarios., Favorecer que el paciente durante su hospitalización, se sienta apoyado y acompañado por parte de un profesional de la salud. (1)
Los objetivos de intervención del psicólogo tienen que estar bien delimitado y establecidos, pero no serán inamovibles, sino flexibles, para adaptarse a las condiciones con las que progresivamente se encontrará. Es importante considerar, en primer lugar, la demanda principal del enfermo sin obviar ni dejar de analizar el resto de las posibles fuentes de estrés y de obstáculo para su buena condición de vida.
Lo ante dicho se debe a que el paciente debe pasar por la evaluación inicial, que implica en lo siguiente:
➢ Cumplimiento o no de las prescripciones médicas.
➢ Aislamiento.
➢ Estrés ante intervenciones quirúrgicas, pruebas y tratamientos.
➢ Aceptación de los cambios físicos y relaciones familiares.
Un factor importante en la interconsulta y que constituye importancia es analizar desde el inicio y así evitar posibles dificultades para el cumplimiento de las prescripciones médicas (adherencia al tratamiento), porque tras este incumplimiento, que puede impedir la mejora o el alivio de determinados síntomas, el paciente puede llegar a manifestar:
- Que ya no es necesario el tratamiento, centrándose en los efectos negativos, como ardor de estómagos, mareos, temblores.
- Sentirse parte de un experimento.
- Desmotivación.
Para prevenir dichas situaciones que pueden obstaculizar la interconsulta médico-psicólogo en la psicoprofilaxis es recomendable que se trabaje en conjunto tratando el caso como uno, aunque cada profesional obviamente trabaje su historial clínico por separado, pero que esto no impida la falta de conocimientos del caso a tratar.
Un elemento de suma importancia es aplicar una evaluación rápida de tipo cognitivo sufridos antes del inicio de la intervención psicológica. Es comprensible que el psicólogo haya heredado de su trabajo todas las cogniciones, incluso creencias y valoraciones, que el enfermo y su familia hayan podido realizar al respecto. (2)
A modo de conclusión, el asesoramiento psicológico antes de las intervenciones quirúrgicas lo que pretende es ayudar al paciente para que permanezca menos tiempo en la unidad de cuidados intensivos, se tenga menor malestar emocional y haya una permanencia más corta en el hospital. Según Oblitas (2005), por ello las intervenciones se deben a formar esta estabilidad emocional y comportamental que permitan la estabilidad del paciente y del núcleo familiar y/o cuidador.
Ya para finalizar y aunque no lo mencioné en el desarrollo de este artículo ¡El papel de la espiritualidad! Esta cualidad, practica o expresión, juega un papel esencial, en la forma de cómo afrontar esta situación (sea vital o no), donde se promueve la esperanza de una recuperación, o en aquellas circunstancias donde a pesar de la intervención quirúrgica, no existe un buen desenlace. Por ende, antes de profesionales o expertos en salud mental, debemos mostrar nuestra humanidad, nuestra empatía, ante las creencias de las personas a quien abordamos.
Carlos Andrés Soto Yali -Psicólogo -CEO – Resilientes En El Camino
Bibliografía:
· Título del artículo: El estrés preoperatorio y la ansiedad pueden demorar la recuperación, Título de la página web: SUSMEDICOS.com, DIRECCIÓN URL: https://www.SUSMEDICOS.com/art_estres_preoperatorio.htm
· Título del artículo: Diplomado de Psicología y Clínica de la Salud, Título de la página web:institutosalamanca.com., DIRECCIÓN URL: https://institutosalamanca.com/diplomados/psicologiaclinicasalud
· Bibliografía (2010). En modalidad de Pasantía, Sonia Esperanza Gélvez Bermúdez. UNIVERSIDAD PONTIFICIA BOLIVARIANA ESCUELA DE CIENCIAS SOCIALES FACULTAD DE PSICOLOGÍA FLORIDABLANCA.
· Título del artículo: Diplomado de Psicología y Clínica de la Salud, Título de la página web: institutosalamanca.com,DIRECCIÓNURL:https://institutosalamanca.com/diplomados/psicologiaclinicasalud

